lunes, 2 de abril de 2012

EN AUXILIO DE LAS ALMAS DEL PURGATORIO



   La Beata Eugenia Smet,  nace en Lille, ciudad del norte de Francia, el 25 de marzo de 1825, en una familia católica. Tenía desde pequeña un gran amor a la vida y sabía comunicarlo. Lo conservó incluso en sus últimos años, en medio de toda clase de pruebas espirituales y de dolores físicos. Este amor por la vida la lleva a fundar en 1856, el Instituto de las Auxiliadoras de las Almas del Purgatorio.

   Lo hizo sostenida por su fe inquebrantable en La Providencia y por la convicción de realizar con ello la Voluntad de Dios. Tuvo además la gracia de contar con el estímulo y la bendición del Santo Cura de Ars, San Juan Mª. Vianney.

  Con esta fundación, la Beata Eugenia Smet pretendía "Aliviar y liberar a las Almas que están expiando sus faltas antes de ser admitidas en la felicidad del Cielo, por medio de oraciones asiduas y por la práctica de obras de misericordia."

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Nota: Como tristemente ha ocurrido con la mayoría de las Congregaciones y Órdenes Religiosas -tras el devastador Concilio Vaticano II- la Fundación de la Beata Eugenia Smet ha sufrido un duro giro hacia el modernismo más radical... pero lo importante es que nos quedemos con la idea inicial de la Fundadora, con ese piadoso deseo de aliviar y liberar a las Almas del Purgatorio, obviando que sus monjas vayan vestidas de cualquier manera menos con el hábito.

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2 comentarios:

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  2. Todos los que han fundado ordenes religiosas, a estas alturas, cada vez que miran desde el cielo la obra que ellos comenzaron en la tierra, tristemente ven cómo sus “hijos e hijas” han pervertido el propósito primero de la orden fundada. En este caso, el Instituto de las Auxiliadoras de las Almas del Purgatorio también sufrió las consecuencias de un concilio que terminó borrando la identidad Católica en el mundo religioso y en los fieles; basta mirar hoy los conventos, monasterios, institutos, seminarios, el modernismo imperante tiene a los consagrados venidos a menos, el sentido de sacralidad de la vida que ellos han querido abrazar parece haberse desvanecido, pues viven como los del mundo, sin signos de que ellos son de Dios.
    Después del Conclio v2 el modernismo llegó para infectar a Nuestra Iglesia, ES COSA DE VER EL ESTADO ACTUAL DE LAS ORDENES: conventos grandes, sin vocaciones, y las que hay…uno se pregunta ¿serán católicos?. Me cuestiono varias cosas DESPUÉS DEL CV2 , y pienso, por ejemplo, que no es inspiración divina el hecho que las religiosas y sacerdotes de hoy prefieran vestir como seglares, bajo el pretexto de ser más cercanos a la grey, como si el habito fuera una barrera, me parece que el consagrado no solo debe decir que lo es, sino parecer tal cosa, pues “el tentador anda como león buscando a quien devorar”, y si bien el habito no hace al monje, lo protege y le recuerda que él vive en el mundo, pero no es del mundo. Creo que hace falta ser y parecer Católicos.
    Pidámosle a la Beata Eugenia Smet que interceda por su Instituto, por la Iglesia, y por el mundo entero, que nos ayude a ser fieles a nuestra Sagrada Fe Católica +

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