domingo, 31 de enero de 2021

PRIMER DOMINGO EN HONOR DE SAN JOSÉ


PREPARACIÓN


               Este ejercicio piadoso en honra del Glorioso San José apenas te llevará unos minutos; procura hacerlo teniendo cerca una imagen suya, que bien puede ser la que acompaña este artículo. Luego, recogido de las preocupaciones cotidianas, intenta adentrarte en espíritu en la casa de Nazareth, y situado en medio de la Sagrada Familia, contempla la figura paternal de San José, que cuida al Niño, lo besa, lo educa, lo mima... ¿qué podrá negar Jesús Nuestro Señor al que así lo acunó en Su Santa Infancia?




INICIO


               Por la señal + de la Santa Cruz, etc.

               En el Nombre del Padre, y del Hijo + y del Espíritu Santo. Amén

               Señor mío, Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío, por ser Vos quien sois, Bondad infinita y porque os amo sobre todas las cosas, (se golpea el pecho 2 veces) a mí me pesa, pésame, Señor, de todo corazón haberos ofendido; yo os propongo firmemente la enmienda de nunca más pecar, y apartarme de todas las ocasiones de ofenderos; confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta.

              Os ofrezco, Señor, mi vida, obras y trabajos, en satisfacción de todos mis pecados, y, así como os lo suplico, así confío en Vuestra Divina Bondad y Misericordia infinita, me los perdonaréis, por los merecimientos de Vuestra Preciosísima Sangre, Pasión y Muerte, y me daréis gracia para enmendarme y perseverar en Vuestro santo servicio hasta el fin de mi vida. Amén.


OFRECIMIENTO


               Glorioso Patriarca San José, eficaz consuelo de los afligidos y seguro refugio de los moribundos; dignaos aceptar el obsequio de este Ejercicio que voy a rezar en memoria de vuestros Siete Dolores y Gozos. Y así como en vuestra feliz muerte, Jesucristo y Su Madre María os asistieron y consolaron tan amorosamente, así también Vos, asistidme en aquel trance, para que, no faltando yo a la fe, a la esperanza y a la caridad, me haga digno, por los méritos de la Sangre de Nuestro Señor Jesucristo y vuestro patrocinio, de la consecución de la vida eterna, y por tanto de vuestra compañía en el Cielo. 


DOLORES Y GOZOS DE SAN JOSÉ


          -Primer Dolor: Cuando San José estaba dispuesto a repudiar a su Inmaculada Esposa 

"Estando desposada su madre María con José, antes de vivir juntos se halló que había concebido en su seno por obra del Espíritu Santo" (Evangelio de San Mateo, cap.1, vers.18).

          -Primera Alegría: Cuando el Arcángel le reveló a San José el sublime Misterio de la Encarnación 

"El Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María, tu esposa, pues lo concebido en Ella es del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús" (Evangelio de San Mateo, cap.1, vers. 20-21).




ORACIÓN


          Glorioso San José, Esposo de María Santísima. Como fue grande la angustia y el dolor de tu corazón, en la duda de abandonar a tu Purísima Esposa, así fue inmensa la alegría cuando te fue revelado por el Ángel el soberano Misterio de la Redención.

          Por este Dolor y aquella Alegría, te rogamos nos consueles en las angustias de nuestra última hora y nos concedas una santa muerte, después de haber vivido una vida semejante a la tuya junto a Jesús y María. 

         Ahora, reza con piedad un Padrenuestro, un Avemaría, el Ave de San José y un Gloria, para terminar diciendo

         Jaculatoria: San José, Modelo y Patrono de aquellos que aman al Sagrado Corazón de Jesús, ruega por nosotros.

        Y terminamos este ejercicio piadoso signándonos en el Nombre del Padre, y del Hijo + y del Espíritu Santo. Amén.




sábado, 30 de enero de 2021

UN SOLO SUSPIRO DE ELLA VALE MÁS QUE TODAS LAS ORACIONES



               Mientras Santo Domingo, predicaba el Rosario cerca de Carcasona, (Francia) le presentaron un albigense poseído por varios demonios. Lo exorcizó en presencia de una gran muchedumbre. Se cree que estaban presentes más de doce mil hombres. 

              Santo Domingo arrojó su Rosario al cuello del poseso y les preguntó a cuál de los Santos del Cielo temían más y cuál debía ser más amado y honrado por los hombres. Los enemigos, ante estas interrogantes, dieron gritos tan espantosos que muchos de los que estaban allí presentes cayeron en tierra por el susto.

              Para no responder, lloraban, se lamentaban y pedían por boca del poseso a Santo Domingo que tuviera piedad de ellos. El Santo, sin inmutarse, les contestó que no cesaría de atormentarlos hasta que respondieran lo que les había preguntado.

               Los demonios comenzaron a gritar:

               “¡Oh enemiga nuestra! ¡Oh ruina y confusión nuestra! ¿Por qué viniste del Cielo a atormentarnos en forma tan cruel? ¿Será preciso que por Ti, ¡oh Abogada de los pecadores, a quienes sacas del Infierno; oh Camino seguro del Cielo!, seamos obligados –a pesar nuestro– a confesar delante de todos lo que es causa de nuestra confusión y ruina? ¡Ay de nosotros! ¡Maldición a nuestros príncipes de las tinieblas!

               ¡Oíd, pues, Cristianos! Esta Madre de Cristo es omnipotente y puede impedir que Sus siervos caigan en el Infierno. Ella, como un sol, disipa las tinieblas de nuestras astutas maquinaciones. Descubre nuestras intrigas, rompe nuestras redes y reduce a la inutilidad todas nuestras tentaciones. Nos vemos obligados a confesar que ninguno que persevere en Su servicio se condena con nosotros.

               Un solo suspiro que Ella presente a la Santísima Trinidad vale más que todas las oraciones, votos y deseos de todos los Santos. La tememos más que a todos los Bienaventurados juntos y nada podemos contra Sus fieles servidores.

               Tened también en cuenta que muchos Cristianos la invocan al morir y que deberían condenarse, según las leyes ordinarias, se salvan gracias a Su intercesión. ¡Ah! Si esta Marieta –así la llamaban en su furia– no se hubiera opuesto a nuestros designios y esfuerzos, ¡hace tiempo habríamos derribado y destruido a la Iglesia y precipitado en el error y la infidelidad a todas sus jerarquías!




               Tenemos que añadir, con mayor claridad y precisión –obligados por la violencia que nos hacen– que nadie que persevere en el rezo del Rosario se condenará. Porque Ella obtiene para sus fieles devotos la verdadera contrición de los pecados, para que los confiesen y alcancen el perdón e indulgencia de ellos”.

               Es así que Santo Domingo hizo rezar el Rosario a todo el pueblo muy lenta y devotamente, y en cada Avemaría que rezaban, salían del cuerpo del poseso una gran multitud de demonios en forma de carbones encendidos".


San Luis María Grignión de Monfort

"El Secreto Admirable del Santísimo Rosario”




LA NEO RELIGIÓN DEL VATICANO II HA PERDIDO SU ESPÍRITU APOSTÓLICO, Padre Benedict Hughes CMRI


               "El diálogo no busca la conversión, sino un mejor entendimiento mutuo". Estas impactantes palabras no las pronunció un protestante, sino nada menos que Benedicto XVI, en su discurso a los miembros de la Curia romana el 21 de Diciembre de 2012. Además de escandalosas para el lector católico, son aún más extraordinarias al admitir directamente que la "Iglesia Conciliar" ha perdido la idea de conversión. Aquí hay algunas citas de la misma declaración:

               "Uno tiene que aprender a aceptar al otro en su ser y pensar de manera diferente... los esfuerzos en torno a un problema en particular se convierten en un proceso en el que, al escuchar al otro, ambas partes pueden encontrar la purificación y el enriquecimiento... El diálogo no busca la conversión, pero la comprensión... Entonces, en este diálogo, ambas partes mantienen conscientemente su identidad, que no cuestionan en el diálogo..."

               Algunos pueden argumentar que estamos sacando estas palabras de contexto, pero no creo que sea el caso. Es cierto que más adelante en el discurso afirma que "la búsqueda del conocimiento y la comprensión" se asocia con "acercarse a la verdad", pero esta vaga afirmación no cambia la realidad de que promueve la práctica de un diálogo que abandona la intención de convertir a otros a la Verdad. De hecho, este nuevo diálogo del Vaticano II es completamente contrario a la enseñanza de la Iglesia Católica, como podemos ver en esta cita de la Encíclica Mortalium animos del Papa Pío XI :




               "La Sede Apostólica no puede tener parte en dichos Congresos, ni de ningún modo pueden los Católicos favorecer ni cooperar a semejantes intentos; y si lo hiciesen, darían autoridad a una falsa religión cristiana, totalmente ajena a la Única y Verdadera Iglesia de Cristo..."

               En un artículo del último número de The Reign of Mary, mencioné algunos de los principales errores del Vaticano II . Pero hay muchos otros, incluidos los que no se expresan literalmente sino implícitamente. Uno es el rechazo del espíritu misionero de la Iglesia, que tiene como objetivo llevar a todas las personas a la fe. Dado que otras religiones son medios de salvación, como enseña el Vaticano II , ¿por qué intentar sacarlas de allí? El modernismo enseña que Dios está en última instancia en todas las religiones y, por lo tanto, todas las religiones son buenas y dignas de alabanza. Por eso los modernistas no ven la necesidad de convertir a otros a la Iglesia católica. En consecuencia, perciben los esfuerzos de conversión misional como completamente innecesarios y hasta faltos de tacto.

               Vemos la devastación que ha causado este error. Muchas Órdenes Religiosas cuyo propósito principal era el trabajo misionero ahora se enfocan en el servicio comunitario como resultado de este nuevo espíritu del Vaticano II. Los misioneros mismos están más interesados ​​en el trabajo humanitario que en convertir almas. Se puede decir que la "Iglesia Conciliar" ha perdido el espíritu apostólico, por el que entendemos el deseo de llevar a todas las personas a la Verdad a través de la oración y la actividad misionera, para llevar a todos a la Iglesia Católica.

               Jesucristo les dijo a Sus apóstoles que fueran a enseñar a todas las naciones. En respuesta a este mandato, la Iglesia ha enviado misioneros a través de los siglos para llevar a todas las personas a Cristo y Su Verdad. Los anales de la Historia de la Iglesia Católica están llenos de vidas de hombres y mujeres que dejaron sus países de origen y arriesgaron su vida para viajar al extranjero con el único propósito de traer almas a la Fe.

               Basta mencionar las dificultades y el trabajo de San Patricio, San Bonifacio, San Cirilo y Metodio y, especialmente, el gran misionero San Francisco Javier. Estos Santos son solo una pequeña muestra del vasto ejército de misioneros enviados por la Iglesia por todo el mundo durante siglos. Inspirados por la Verdad del Evangelio, pensando en el valor del alma inmortal y el ejemplo de los Apóstoles, enfrentaron todos los peligros y sacrificaron sus comodidades y seguridad para llevar la Fe a tantas almas como fuera posible. Muchos de ellos dejaron a sus familias y su tierra natal sabiendo que nunca volverían a verla. Pero todo esto no carecía de significado para ellos, porque se sacrificaron por la salvación de las almas.

               Además, para encontrar tales ejemplos, no tenemos que ir muy lejos en la historia. En el siglo XIX, el gran Cardenal francés Lavigerie, fundó la Orden de los Misioneros (conocidos como los Padres Blancos por el color del hábito). Estos Padres viajaron por la jungla africana para llevar la Fe a los infieles. Tan grande era su celo que, si bien sabían que podían morir de malaria o de alguna otra enfermedad (que les sobrevino a tantos después de una breve actividad misionera), querían enfrentar estos peligros.

              Una idea inspiró a estos y a otros innumerables misioneros: la comprensión del valor del alma inmortal. Se puede decir que el alma tiene el valor de la Preciosa Sangre de Jesús porque Él quiso derramar Su Sangre aunque solo una alma fuera salva. Cada alma es amada por Dios, su Creador, que quiere que todas las almas lleguen al conocimiento de la verdad y obtengan la salvación. Cada alma vivirá para siempre, ya sea con Dios o separada de Él por toda la eternidad. Sabiendo que la salvación eterna de cada alma depende de cómo vive la persona, y que innumerables almas están sumidas en la oscuridad del error y la maldad, los heroicos misioneros de la Iglesia Católica no escatimaron nada con tal de llegar a ellos.

               Mientras tanto, el Vaticano II cambió todo eso. De hecho, este infame Concilio distorsionó por completo la idea del propósito del trabajo misionero y la noción de conversión. Su nuevo espíritu de "evangelización" es completamente ajeno a la práctica de la Iglesia. ¡Qué insulto a Cristo, el Divino Fundador de la Iglesia Católica! Ocultar o menospreciar la Verdad, avergonzarse de ella es lo mismo que avergonzarse de Cristo. No olvidemos sus palabras: "Quien me niegue ante los hombres, yo lo negaré ante mi Padre", son las palabras que los seguidores de este nuevo espíritu de diálogo deben contemplar con temor.

               Debemos estar agradecidos a Benedicto XVI por admitir al menos abiertamente que la "Iglesia Conciliar" ha perdido su espíritu apostólico. Por lo general, esconde su modernismo detrás de frases que suenan tradicionales. En este caso, sin embargo, afirmó abiertamente lo que los Católicos conscientes siempre habían sabido: que esta nueva iglesia era una iglesia diferente, y ciertamente no la Iglesia Católica de nuestros antepasados. Que cualquiera que lea comprenda y abandone esta Iglesia apóstata del Vaticano II de una vez por todas .


Padre Benedict Hughes CMRI

(Congregación de María Reina Inmaculada)



viernes, 29 de enero de 2021

Sobre la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo... ¿quién acertará a entender las angustias que acosaron al Corazón de Jesús?

   



MEDITACIONES SOBRE LA PASIÓN 
DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO

"Mira a menudo y contempla 
la imagen de Jesús Crucificado..."

Por San Alfonso María de Ligorio, Doctor de la Iglesia


               El Verbo Divino, amando a Su Padre infinitamente, aborrecía el pecado, por conocer bien su malicia, con infinito aborrecimiento. Y para desterrar el pecado del mundo, y para que no fuese ultrajada la Majestad de Su Padre, bajó del Cielo a la tierra y se hizo hombre, dispuesto a sufrir una muerte cruel e ignominiosa. Pero al entender que después de Su trabajo y  desvelos se habían de cometer tantos pecados en el mundo, este dolor, en concepto de Santo Tomás de Aquino, venció en intensidad y sentimiento al dolor que experimentaron todos los penitentes de sus propias culpas, y sobrepujó todas las congojas que puedan atormentar el corazón humano. La razón es clara: porque el sufrimiento en el hombre va siempre mezclado con algún alivio y consuelo, mientras que el dolor de Jesús fue puro, sin ningún refrigerio ni lenitivo.

               ¡Ah!, si yo os amase, Jesús mío, si yo os amase, me bastaría considerar lo mucho que por mí habéis padecido, para que se me tornasen agradables y llevaderos todos los dolores y oprobios y molestias del mundo. Inflamadme en vuestro Santo Amor, a fin de que sufra con alegría, o a lo menos con paciencia, los pocos trabajos que me enviéis. No permitáis que me sorprenda la muerte antes que pueda manifestaros mi agradecimiento por las muchas finezas de vuestro Amor. En todas las tribulaciones que me sobrevengan, mi deseo será repetiros sin cesar: Jesús mío, me abrazo con estas penas y trabajos para manifestaros mi amor; quiero sufrir para agradeceros y complaceros.

               Nos habla la historia de muchos penitentes que, iluminados por la Luz Divina, llegaron a comprender la malicia de sus pecados, muriendo en el acto de puro dolor. Ahora bien, ¿quién acertará a entender las angustias que acosaron al Corazón de Jesús al pasar por delante de Sus ojos todos los pecados del mundo, todas las blasfemias y sacrilegios, todas las deshonestidades y mil otros géneros de culpas que se habían de cometer en el mundo después de Su afrentosa Muerte?.

              Pues bien, todos estos crímenes, a manera de bestias feroces, se lanzaron sobre el Corazón de Jesús, para despedazarlo y consumirlo. Por esto nuestro amorosísimo Redentor, en las tristezas y agonías del Huerto, exclamaba: ¿Conque es éste, ¡oh mortales!, el pago que vais a dar al Amor infinito que estoy demostrando?. ¡Ay, si Yo advirtiese que para responder a Mi cariño aborrecierais el pecado y comenzaseis a amarme, ¡con cuánto gozo y alegría me lanzaría a la muerte por vosotros! 




NUESTRA MEJOR MORADA ESTÁ EN LAS LLAGAS DE CRISTO, por San Francisco de Sales

               

               ...puesto que encuentro tantos bienes en las Llagas de mi Jesús, quiero seguir el consejo de San Buenaventura y tomo la resolución de hacer tres tiendas, no sobre el Tabor, pues Pedro no sabía lo que decía cuando hacía esta proposición a Jesús, sino en lo alto del Calvario donde el propio Señor nos ha preparado estas tres moradas en Sus Divinas Llagas. 




               La primera estará en las Llagas hechas a los pies de mi Salvador. Besaré con un vivo agradecimiento estos pies atravesados por amor a mí; allí aprenderé a alejar mis pies de todos los caminos que conducen a las locas alegrías del mundo; allí comprenderé la dicha de caminar... siguiendo las huellas... de los pasos de Jesús. 

               La segunda será las Llagas de Sus manos. Veré en ellas estas manos abiertas para recibirme, estos brazos extendidos para acogerme, sacaré de ello la fuerza y el poder que reside en estas manos adorables. “Es en estas manos donde se oculta la fuerza”, dice Habacuq.

               La tercera, la más ancha, la más querida por mi corazón, será la Llaga que la lanza hizo en Su Costado. Estableceré mi morada en el Divino Corazón traspasado por mí. Junto a este hogar ardiente, sentiré reanimarse la llama de amor hasta ahora tan debilitada ¡Ah! Señor, vuestro Corazón es la verdadera Jerusalén; permitidme elegirlo para siempre para el lugar de mi reposo: “Es el lugar que he elegido para morar para siempre jamás.” 



jueves, 28 de enero de 2021

EL CORAZÓN DE JESÚS EN EL SAGRARIO


                “Todas las noches del Jueves al Viernes, te haré participante de aquella mortal tristeza que quise sentir en el Huerto de Getsemaní… Y para acompañarme en la humilde oración que presenté entonces a Mi Padre, te levantarás entre once y doce de la noche; y prosternada, pegando el rostro con la tierra, procurarás no sólo aplacar la Ira Divina pidiendo gracia para los pecadores, sino también endulzar de alguna manera, la amargura que sentí por el abandono de Mis Apóstoles, a quienes reprendí por no haber podido velar una hora Conmigo”


(Revelación del Sagrado Corazón de Jesús a Santa Margarita María de Alacoque)


               Resulta, pues, de estas palabras que la Hora Santa es una de las prácticas más queridas del Sagrado Corazón de Jesús. Tiene por objeto consolarle por la ingratitud de los hombres; reparar las ofensas de los pecadores, obtener gracias particulares para los agonizantes, consuelo para las personas afligidas y en fin, excitarnos a una viva contrición.

             Se puede hacer la Hora Santa delante del Santísimo Sacramento, o transportándose en espíritu al pie de un Tabernáculo, porque no se debe consolar sólo la agonía dolorosa de Getsemaní, sino también la agonía incesante, si podemos decirlo así, del Dios de la Encarnación; pues el mismo que sufrió la primera, soporta la segunda, abandonado en los Sagrarios-Calvarios.

             No hay prescripta para emplear devotamente en la Hora Santa, ninguna meditación particular; pero las palabras de Nuestro Señor, indican que conviene meditar su dolorosa agonía, sus profundas humillaciones y su amor, pagado con tantas ingratitudes; así como deplorar el perdón de nuestros pecados, y los ultrajes hechos a la Majestad divina en el discurso de los siglos.

             El Ejercicio de la Hora Santa se hace el Jueves antes de medianoche, en la Iglesia o en cualquier otro lugar. Para pasar devotamente la Hora Santa se desprende de las palabras de Nuestro Señor, que conviene meditar Su Dolorosa Agonía, Sus profundas humillaciones, Su Amor pagado con tanta ingratitud y deplorar nuestros pecados y todos los ultrajes hechos a la Majestad Divina en el curso de los siglos.





               Estar en el Sagrario significa venir del Cielo todo un Dios, hacer el milagro más estupendo de sabiduría, poder y amor para poder llegar hasta la ruindad del hombre, quedarse quieto, callado y hasta gustoso, lo traten bien o lo traten mal, lo pongan en casa rica o miserable, lo busquen o lo desprecien, lo alaben o lo maldigan, lo adoren como a Dios o lo desechen como mueble viejo... y repetir eso mañana, y pasado mañana, y el mes que viene, y un año, y un siglo, y hasta el fin de los siglos... y repetirlo en este Sagrario y en el templo vecino y en el de todos los pueblos... y repetir eso entre almas buenas, finas y agradecidas, y entre almas tibias, olvidadizas, inconstantes y almas frías, duras pérfidas, sacrílegas...

               Eso es estar el Corazón de Jesús en el Sagrario, poner en actividad infinita un Amor, una paciencia, una condescendencia tan grandes por lo menos como el poder que se necesita para amarrar a todo un Dios al carro de tantas humillaciones. 

               ¡Santa, deliciosa, arrebatadora palabra que dice a mi Fe más que todas las maravillas de la tierra y todos los milagros del Evangelio, que da a mi esperanza la posesión anticipada de todas las promesas y que pone estremecimientos de placer divino en el amor de mi alma!.

               Sabedlo, demonios que queréis perderme, que tratáis de sonsacarme, enfermedades que ponéis tristeza en mi vida, contrariedades, desengaños, que arrancáis lágrimas a mis ojos y gotas de sangre a mi corazón, pecados que me atormentáis con vuestros remordimientos, cosas malas que me asediáis, sabedlo, que el Fuerte, el Grande, el Magnífico, el Suave, el Vencedor, el Buenísimo Corazón de Jesús está aquí, ¡aquí en el Sagrario mío!

              Padre Eterno, ¡bendita se la hora en que los labios de Vuestro Hijo Unigénito se abrieron en la tierra para dejar salir estas palabras: "Sabed que Yo estoy todos los días con vosotros hasta la consumación de los siglos!"

             Padre, Hijo y Espíritu Santo, benditos seáis por cada uno de los segundos que está con nosotros el Corazón de Jesús en cada uno de los Sagrarios de la tierra.

Obispo Manuel González


Toca aquí para conocer al completo

LA SEMANA DEL BUEN CRISTIANO




LA GLORIA DE ESPAÑA ÍNTIMAMENTE UNIDA CON LA RELIGIÓN CATÓLICA


               Siempre Nos fue sumamente cara la noble Nación Española por sus insignes méritos para con la Fe Católica y la Civilización Cristiana, por la tradicional y ardentísima devoción a esta Santa Sede Apostólica y por sus grandes instituciones y obras de apostolado, pues ha sido Madre fecunda de Santos, de Misioneros y de Fundadores de ínclitas Ordenes Religiosas, gloria y sostén de la Iglesia de Dios.




               Y precisamente porque la gloria de España está tan íntimamente unida con la Religión Católica, Nos sentirnos doblemente apenados al presenciar las deplorables tentativas, que, de un tiempo a esta parte, se están reiterando para arrancar a esta Nación a Nos tan querida, con la Fe Tradicional, los más bellos títulos de nacional grandeza. 

               ...de nuevo afirmar Nuestra viva esperanza de que Nuestros amados hijos de España, penetrados de la injusticia y del daño de tales medidas, se valdrán de todos los medios legítimos que por derecho natural y por disposiciones legales quedan a su alcance, a fin de inducir a los mismos legisladores a reformar disposiciones tan contrarias a los derechos de todo ciudadano y tan hostiles a la Iglesia, sustituyéndolas con otras que sean conciliables con la conciencia católica. 

               Pero entre tanto Nos, con todo el ánimo y corazón de Padre y Pastor, exhortamos vivamente a los Obispos, a los Sacerdotes y a todos los que en alguna manera intentan dedicarse a la educación de la juventud, a promover más intensamente con todas las fuerzas y por todos los medios, la Enseñanza Religiosa y la práctica de la Vida Cristiana. Y esto es tanto más necesario, cuanto que la nueva legislación española, con la deletérea introducción del divorcio, osa profanar el santuario de la familia, sembrando así -junto con la intentada disolución de la sociedad doméstica- los gérmenes de las más dolorosas ruinas en la vida social.



La Cruz de los Caídos de Aguilar de la Frontera,
en el municipio andaluz de Córdoba, retirada por
imperativo legal de la inicua "Ley de Memoria Histórica"
el pasado Martes, 19 de Enero de 2021


               Ante la amenaza de daños tan enormes, recomendamos de nuevo y vivamente a todos los Católicos de España, que, dejando a un lado lamentos y recriminaciones, y subordinando al bien común de la Patria y de la Religión todo otro ideal, se unan todos disciplinados para la defensa de la Fe y para alejar los peligros que amenazan a la misma sociedad civil.


Papa Pío XI 

Extractos de la Carta Encíclica 

Dilectissima Nobis3 de Junio de 1933



LAS MARAVILLAS DEL SANTO NOMBRE, por el Padre Paul O’Sullivan. Parte II




HACERLO TODO EN NOMBRE DE JESÚS


               San Pablo nos dice que debemos de hacer todo lo que hacemos tanto sea en palabras o en el trabajo en el Nombre de Jesús, "Todo cuanto hacéis, sea de palabra o de obra, todo en Nombre de Nuestro Señor Jesucristo." (Colosenses, cap. 3, vers. 17).

               De esta manera todos los actos se hacen en un Acto de Amor y Mérito. Y más aún, recibimos la gracia y la ayuda para hacer todas nuestras acciones perfectamente bien.

               Debemos, sin embargo, hacer lo que mejor podamos en acostumbramos en decir "Jesús, Jesús, Jesús", muy a menudo todos los días. Podemos hacerlo cuando nos vestimos, en el trabajo -no importa lo que estamos haciendo- paseando, en momentos de tristeza, en casa y en la calle, en todas partes.

          No hay nada más fácil si nos esforzamos en hacerlo con regularidad. Lo podemos hacer muchísimas veces al día.

          Piensa que cada vez que decimos "Jesús" devotamente, 1) damos gran gloria a Dios, 2) recibimos grandes gracias, 3) y ayudamos a las Almas del Purgatorio.

          Pongamos ahora algunos ejemplos que demuestran el poder del Santo Nombre. 


EL MUNDO EN PELIGRO SALVADO 

POR EL SANTO NOMBRE


               En el año 1274 grandes males amenazaron al mundo. La Iglesia fue asaltada por furiosos enemigos desde adentro y fuera. Fue tan grande el peligro que el Papa Gregorio X, que reinaba por entonces, convocó un Concilio de Obispos en Lyons para determinar la mejor manera de salvar a la sociedad de la ruina en la que estaba cayendo. Entre muchas de las formas propuestas, el Papa y los Obispos eligieron la que ellos consideraron más fácil y eficaz de todas, es decir, la frecuente repetición del Santo Nombre de Jesús.

              El Santo Padre entonces pidió a los Obispos del mundo y a sus Sacerdotes que invocaran el Nombre de Jesús y urgieran a sus fieles el poner toda su confianza en éste poderoso Nombre, repitiéndolo constantemente con ilimitada confianza. El Papa encargó especialmente a la Orden de Santo Domingo (Dominicos) la gloriosa tarea de predicar las Maravillas del Santo Nombre, trabajo que ellos cumplieron con ilimitado celo.

               Sus hermanos Franciscanos les secundaron. San Bernardino de Siena y San Lorenzo de Puerto- Mauricio fueron ardientes Apóstoles del Santo Nombre de Jesús.

              Sus esfuerzos fueron coronados con el éxito. Fueron barridos los enemigos de la Iglesia y desaparecieron los peligros que amenazaban a la sociedad y la suprema paz reinó una vez más.

               Esta es la lección más importante para nosotros porque, en nuestros días, terribles sufrimientos están aplastando muchas naciones. Y aún mayores tribulaciones están amenazando a todas las demás.

              Ningún gobierno o gobiernos parecen lo bastante fuertes y hábiles como para detener este tremendo torrente de males. No hay más que un remedio y es la oración.


LETANÍA DE ALABANZAS AL 

SANTO NOMBRE DE JESÚS

(toque sobre la imagen para verla en su tamaño original)





PRONUNCIAR EL SANTO NOMBRE DE JESÚS

ES LA ORACIÓN MÁS FACIL Y PODEROSA


              Todo Cristiano debe volver a Dios y pedirle Misericordia. La oración más fácil de todas las oraciones, como hemos visto, es el Nombre de Jesús.

              Todos sin excepción pueden invocar este Santo Nombre cientos de veces al día, no solamente por sus propias intenciones, sino también para pedir a Dios que libre al mundo de una inminente ruina.

               Es asombroso lo que una persona que reza puede hacer para salvar su país y a la sociedad. Leemos en la Sagrada Escritura como Moisés salvó por sus oraciones al pueblo de Israel de la destrucción y como una piadosa mujer, Judít de Betulia, salvó su ciudad y su gente cuando los Gobernadores estaban desesperados y a punto de rendirse a sus enemigos.

               De nuevo notamos, que las dos ciudades Sodoma y Gomorra, que Dios destruyó con fuego, por causa de sus pecados y crímenes, ¡les hubiera perdonado si hubiera habido solamente diez personas que rezaran por ellos!

               Una y otra vez leemos de reyes, emperadores, hombres de estado y famosos comandantes militares que pusieron toda su confianza en la oración, y así obraron maravillas. Si las oraciones de un hombre pueden hacer tanto, ¿Cuánto más harán las oraciones de muchos?

               El Nombre de Jesús es la más corta, más fácil, y más poderosa de las oraciones. Todos pueden decirlo incluso en medio de su trabajo diario. Dios no puede rehusar de oírlo.

               Invoquemos el Nombre de Jesús pidiéndole que nos salve de las calamidades que nos amenazan.


Continuará...



miércoles, 27 de enero de 2021

SAN JOSÉ, VARÓN JUSTO

 

               A partir del Domingo 31 de Enero, comenzaremos (Dios mediante) con la tradicional Devoción de los Siete Domingos en Honor de San José; recordaremos los principales acontecimientos en los que San José participó, ya como Esposo Virginal de María, ya como Padre Putativo de Cristo Nuestro Señor, pero al fin, como colaborador indispensable en la educación del Divino Niño y fiel protector de la Purísima María.

               La Sagrada Escritura nos presenta a San José como "varón justo" (Evangelio de San Mateo, cap. 1, vers. 19) que es lo mismo que decir piadoso, servidor irreprochable de Dios, cumplidor de la Voluntad Divina... es pues San José, Modelo de Vida Cristiana, ya que convivió con Cristo y María Virgen, haciendo de la Casa de Nazareth la primera Iglesia Doméstica, en la que el Glorioso San José entregó, al final de la vida, su alma en los brazos de aquellos dos Amores, Jesús-María, como para enseñarnos a nosotros que solo en medio de Ellos, podemos alcanzar la paz en esta vida y la felicidad eterna en la otra. 


EL DOMINGO 31 DE ENERO

comienzan los Siete Domingos

en Honor de San José










MADRE PATROCINIO, 130 años intercediendo por nosotros


               La Madre María de los Dolores y Patrocinio nació el 27 de Abril de 1811, cuando España era invadida por los franceses, en el término de San Clemente (Cuenca), siendo abandonada casi de inmediato por su madre en pleno campo y en la nieve, hasta que fue hallada casualmente por su padre, desconocedor del hecho.

               Ingresó como religiosa Concepcionista Franciscana en Madrid, a los dieciocho años, el 19 de Enero de 1829, en el Convento del Caballero de Gracia. Sor Patrocinio emite sus votos de pobreza, castidad, obediencia y de vivir en perpetua clausura en 1830, con diecinueve años. En Octubre de este año nace la futura Reina de España, Isabel II. 



Sor Patrocinio, amiga y consejera de la Reina Isabel II


               La persecución del demonio sería continua, de día y de noche, especialmente de noche, cuando Sor Patrocinio se queda sola en su celda. Todas las monjas oían los ruidos que salían de allí. La angustia de estos años, vivida por Sor Patrocinio y por todo el convento termina el día 13 de Agosto de 1831, cuando Sor Patrocinio es agraciada con la celestial imagen de la Virgen del Olvido, Triunfo y Misericordias... (Para leer el relato completo de la Aparición solo tiene que tocar AQUÍ).

               Cerrado años más tarde este convento del Caballero de Gracia, pasan las religiosas a ocupar el de Jesús Nazareno, donde Sor Patrocinio fue nombrada Maestra de Novicias en 1845. Elegida Abadesa el 7 de Febrero de 1849, desempeña el cargo durante 42 años, hasta su muerte, en diversas comunidades.

               A partir de 1856 fundó y reformó numerosos conventos de la misma Orden de la Inmaculada Concepción, de clausura, pero con internados y colegios para niños y niñas pobres. La Revolución de 1868 acabó con la mayor parte de sus fundaciones, pero hizo algunas en Francia, adonde se vio obligada a huir. Regresó a España con la Restauración, a finales de 1876.

               Sor Patrocinio fue una mujer extraordinaria, una de las personalidades más importantes de la Iglesia del siglo XIX; no solo por su belleza física y su inteligencia sino por su singular vida de santidad. Humildad y obediencia fueron sus principales virtudes. Testigos oculares de diversa categoría atestiguan en favor de sus revelaciones privadas, de sus éxtasis, de sus milagros y sobre todo, de los cinco estigmas que la hicieron configurarse aún más con su Esposo Cristo; popularmente pasaría a la Historia como “La Monja de las Llagas”. 

               Mantuvo unas estrechas y confidenciales relaciones con la Reina Isabel II y su marido el Rey Francisco de Asís, lo que originó una oleada de críticas y burlas malignas por parte de los masones y liberales; se acusó, sistemáticamente a Sor Patrocinio de todos los males de la Corte y de España, pretexto para desterrarla en varias ocasiones.

              Murió santamente en Guadalajara, el 27 de Enero de 1891, a los ochenta años de edad y sesenta y dos de vida religiosa, habiendo llevado en su cuerpo las llagas, que emanaban  abundante sangre de la manos, pies, costado y de la cabeza, durante más de sesenta años.



La Madre Patrocinio en una fotografía al final de su vida


               Su virginal cuerpo, se conserva en un sepulcro, en la capilla principal de la iglesia conventual de las Religiosas Concepcionistas Franciscanas de Guadalajara. Se abrió el proceso de su beatificación a mediados de 1907; en 1930 fueron aprobados sus escritos.




VISIONARIOS: LOS FALSOS PROFETAS. Parte I: La Revelación Pública y las revelaciones privadas. Cuidado con los visionarios


...habrá entre vosotros falsos maestros 

que introducirán solapadamente herejías, 

y renegarán del Señor que los redimió, 

atrayendo sobre sí mismos una inminente perdición. 

Muchos imitarán su desenfreno, y por causa de ellos, 

el camino de la verdad será objeto de blasfemias. 

Llevados por la ambición, 

y valiéndose de palabras engañosas, 

se aprovecharán de vosotros. 


II Carta de San Pedro, cap. 2


               Los lectores asiduos de esta página bien conocen de mis simpatías y verdadero apego por las "Revelaciones Privadas", aquellas manifestaciones celestiales que no forman parte del Magisterio de la Iglesia, en las que no necesariamente debemos creer, puesto que no son materia de Fe ni Dogmas, pero que sin embargo, al pertenecer al espectro carismático, algunas de ellas han tenido un peso más que considerable en la piedad popular; tal es el caso del Escapulario del Carmen, entregado místicamente por la Virgen a San Simón Stock, aparición que recibió la aprobación formal de la Iglesia, que además indulgenció el Escapulario, para después aprobar, mediante una Bula Papal, la Promesa de la Sabatina, aparte de canonizar al vidente.

               Otro caso es el de Santa Margarita María de Alacoque, principal Apóstol de la Devoción al Sagrado Corazón de Jesús, que tantísima santidad ha aportado a la Iglesia en los últimos siglos; imposible enumerar las almas que se han santificado por la necesaria devoción al Sacrosanto Corazón de Cristo, que además ha inspirado multitud de Congregaciones, Apostolados, Grupos de Oración...

              Y cómo no hablar de las Apariciones de Fátima, cuyo llamado a la oración y a la penitencia ha sido apostolado fecundo que aún hoy resuena; la invitación al rezo cotidiano del Santo Rosario, la Devoción de los Primeros Sábados de Mes para desagraviar al Inmaculado Corazón de María, el Santo Rosario en familia, son solo algunos de los frutos de aquellas manifestaciones privadas, pero que movieron y evangelizaron el corazón de muchas almas que conocieron los rigores de la guerra y que hallaron en Fátima el consuelo y la esperanza de la Promesa de Su Triunfo. Ante el Mensaje de Fátima, el Papa Pío XII quiso consagrar el Mundo al Inmaculado Corazón de María.



Portada de un folleto de "Confidencias", supuestos "mensajes celestiales"
llenos de faltas contra la Doctrina Católica; el "vidente" que los recibe
se hace llamar a veces Antonio de la Santa Faz, otras Alma pequeña.
Pertenece a un grupo que a su vez se escindió de la destructiva secta 
de El Palmar de Troya; hablaré de él en próximos artículos...


LA REVELACIÓN PÚBLICA 

Y LAS REVELACIONES PRIVADAS


               Siguiendo la Doctrina de la Iglesia, debemos distinguir entre “Revelación Pública” y “revelaciones privadas” y advertir que entre ambas hay una diferencia no sólo de grado sino de esencia.

               La Revelación Pública es la acción reveladora de Dios destinada a toda la Humanidad que ha encontrado su expresión literaria en las dos partes de la Biblia: el Antiguo y el Nuevo Testamento; la Revelación Pública termina con el Libro del Apocalipsis y la muerte del último Apóstol, San Juan Evangelista.

               Las revelaciones privadas son comunicaciones celestiales -posteriores al Evangelista San Juan- con las que Dios ha querido comunicarse con un alma en particular, para transmitirle una demanda, una misión, destinada, generalmente, no solo en provecho de la persona que recibe esa revelación, sino en beneficio de otras muchas más almas. 

               Las revelaciones privadas NO vienen a completar la Revelación Pública, sino  que se limitan a recordarla y, de alguna manera, buscan ayudar a vivirla más plenamente en una cierta época de la Historia.




Extracto de una "Confidencia" de Alma pequeña;
señala en un esquema, con todo detalle, los
acontecimientos del Fin de los Tiempos... 
"Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá 
de tu venida, y del fin del siglo? Respondiendo Jesús, les dijo: 
Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán 
muchos en Mi Nombre, diciendo: 
Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán

(Evangelio de San mateo, cap. 24, vers. 3)


LA POSTURA DE LA IGLESIA

FRENTE A LAS REVELACIONES PRIVADAS


               Ante cualquier revelación privada, a la Iglesia le corresponde ser cauta, prudente, y aclarar, tras un estudio juicioso, si en dicha revelación no hay nada contra el Dogma Católico y la Moral, o de otra manera: que se ajusta a la Verdad de Cristo manifestada en la Revelación Pública. 

               En relación a aquellas almas a las que se proponen para ser canonizadas oficialmente por la Iglesia, y que tal vez pudieron tener a lo largo de su vida alguna revelación privada, el Cardenal Próspero Lorenzo Lambertini, eminente teólogo y  luego Papa con el nombre de Benedicto XIV, explicó que "No se debe un asentimiento de Fe Católica a revelaciones aprobadas en tal modo; no es ni tan siquiera posible. Estas revelaciones exigen mas bien un asentimiento de fe humana, según las reglas de la prudencia, que nos las presenta como probables y piadosamente creíbles".(1) 

               Frente a cualquier supuesta manifestación sobrenatural, como una aparición, o en el caso de algunos "místicos" que dicen recibir revelaciones celestiales, la Iglesia, siempre prudente, examina cada caso en particular, valorando en el presunto vidente, sus actitudes, tanto las morales como las psicológicas, su estilo de vida, formación intelectual, etc., todo ello con vistas a descartar fraudes o simples trastornos mentales, como por ejemplo imaginación delirante o psicosis alucinatoria.


CUIDADO CON LOS VISIONARIOS 
CUYAS SUPUESTAS REVELACIONES 
CONTRADICEN LA FE CATÓLICA


               Por desgracia, desde hace unas décadas, han ido floreciendo una serie de "videntes", a los cuales prefiero calificar como visionarios, por aquello de que -como iré demostrando en sucesivos artículos- no merecen mejor tratamiento. 

               Advierto que estos individuos, han encontrado en internet la ventana desde donde lanzar al mundo virtual kilos y kilos de supuestos mensajes celestiales, que dicen recibir directamente de la Virgen María a veces, otras de Nuestro Señor o del mismo Padre Eterno... algunos hablan con San Miguel o con el Padre Pío con una familiaridad que raya lo cómico. Casi todos esos "instrumentos" (2) o "portavoces" -como también se hacen llamar- emplean un vocabulario tan llano y vulgar que más que un coloquio celestial bien pareciera que comparten mesa y mantel a diario con los Bienaventurados del Cielo; no me veas irrespetuoso, ya que prefiero usar la ironía ante la estupidez supina que cometen esos visionarios, que se jactan de que el Señor "habla" a través de ellos. 

               También es manifiesta la adversión que sienten hacia los Sacerdotes estos "videntes de pandereta"; rechazan la dirección espiritual, la guía y cualquier consejo. Orgullos, altaneros, presumen que a ellos "los dirige directamente el Señor"... de nuevo ironizo para decir que me siento un pobre gusano ante Santos de semejante talla, bendecidos con la gracia de ser conducidos por Cristo mismo o el Padre Celestial, depende del visionario que se trate. Huyen de la revisión de la Iglesia, tergiversan e interpretan sus "mensajes" según la necesidad del momento, como iré demostrando en otros artículos destinados a esta materia.




ANTE LAS REVELACIONES PRIVADAS

DOS ACTITUDES EXTREMAS

por el Padre José Luis de Urrutia SJ


               Ante las profecías/revelaciones privadas hay dos actitudes extremas: los que admiten todas, sin más, y los que sin más las rechazan. 

               Admitir una profecía sin más, aun con el buen deseo de aceptar la Revelación de Dios, es insensato, pues enseña la experiencia que siempre hay muchos impostores e ilusos, que se atribuyen dones que no tienen, y falsarios que tergiversan los hechos. Hoy pululan quizás más que nunca, engañando incluso a Sacerdotes. Además, todo buen Cristiano ha de poner empeño en seguir a Cristo y practicar las virtudes; sería una desviación descuidar esto o sustituirlo por la búsqueda de profecías o sensacionalismos religiosos.

               Otros, parte por evitar ser engañados y parte porque la Revelación Pública basta, rechazan de plano, a priori, cualquier revelación privada, no queriendo ni examinarla sin prejuicios. Pero en la Iglesia vemos es práctica tradicional y universal, seguida por los Santos y los Papas, prestar fe a las revelaciones privadas auténticas. "No desprecies las profecías", nos aconseja San Pablo (3) y vemos que es un carisma corriente y estimado en el Nuevo Testamento... "derramaré Mi Espíritu sobre cualesquiera que sean los mortales. Sus hijos e hijas profetizarán, los jóvenes tendrán visiones y los ancianos tendrán sueños proféticos. En aquellos días derramaré Mi Espíritu sobre Mis siervos y ellos profetizarán". (4)

               Si tenemos pruebas que una revelación es auténtica es obvio que le prestemos fe, no divina, sino humana; es decir, que la creamos como creemos otros hechos históricos. Pero cuando están explícita o implícitamente aprobadas por la Iglesia, como la Revelación de los Nueve Primeros Viernes del Sagrado Corazón, al aceptarlas ejercitamos también nuestra fe en la Iglesia, igual que al obedecer otra enseñanza del Magisterio.

               El problema difícil de discreción de espíritus, cuando no hay esa aprobación de la Iglesia, es distinguir qué profecías, o qué profetas, son verdaderos y cuáles no. Según la Teología Tradicional, son señales de falsedad:

               - Si dice algo contra la Doctrina Católica.

               - Si da como revelado algo ciertamente falso.

               - Si no obedece a la Autoridad Eclesiástica.

               -Si le falta humildad, caridad... o si busca aparecer, vivir bien, ganar dinero, fama...

               Es posible una revelación sobrenatural a un pecador, pero no que Dios se siga sirviendo como profeta de quien no lleva una vida de perfección cristiana. (V.gr. la Aparición de la Virgen Milagrosa al judío Ratisbonne, que abrazó la Fe Católica y se hizo Sacerdote)


Padre José Luis de Urrutia, SJ 

en su obra "El Tiempo que se aproxima


     NOTAS

       1 Tratado "De Servorum Dei Beatificatione et de Beatorum Canonizatione".

       2 "Instrumento"; de esta manera asegura Ida Peerdeman que la llamaba la Virgen; el 31 de Mayo de 1945 la Virgen le dice "Tú eres un instrumento. Por medio de este instrumento, en un pequeño país que está al borde del precipicio, la Señora de Todos los Pueblos dará cada año sus amonestaciones y su consuelo". Curiosamente, muchos pseudo-videntes, conocedores de estas manifestaciones, usan el mimo término y casi plagian el sentido de esta revelación privada.

       3 I Carta de San Pablo a los Tesalonicenses, cap. 5, vers. 20.

       4 Hechos de los Apóstoles, cap. 2, vers. 17-18.