"...Mientras dormían los compañeros, San Francisco se puso en oración, y como continuaba orando, de pronto, en la primera vigilia de la noche, vino con mucho estrépito y alboroto una gran muchedumbre de demonios ferocísimos, que desataron contra él recia batalla molestándole rudamente: uno le cogía de aquí, otro ... de allá; éste lo tiraba al suelo, el otro lo lanzaba en alto; quién le amenazaba con una cosa, quién le reprochaba de otra.
Y así, se ingeniaban de diversas maneras para estorbarle en su oración, pero sin lograrlo, porque Dios estaba con él. Después de aguantar durante largo tiempo estos ataques de los demonios, San Francisco comenzó a gritar en alta voz: -- Espíritus condenados, vosotros nada podéis fuera de aquello que os permite la mano de Dios. Por eso, de parte de Dios todopoderoso, os digo que podéis hacer de mi cuerpo todo lo que os es permitido por Dios; yo lo soportaré de buen grado, porque no tengo peor enemigo que mi cuerpo; si vosotros, pues, me ayudáis a tomar venganza de mi enemigo, me hacéis un servicio muy grande..."
(Consideración I , Vida de San Francisco de Asís)
No es una sorpresa escuchar, incluso a sacerdotes, decir que el demonio es un mito, que no existe, que forma parte de una leyenda muy antigua, por no decir medieval...sin embargo, esa es la mayor victoria del ángel caído, hacer creer al mundo que él no existe...hay que estar despiertos y atentos en la oración, tal como lo hacía mi Padre San Francisco de Asís +
ResponderEliminarRecomiendo leer CARTAS DEL DIABLO A
ResponderEliminarSU SOBRINO (The Screwtape Letters) de
C. S. LEWIS.