Hoy lunes, día que dedicamos a ofrecer oraciones por las Almas del Purgatorio, quiero compartir con vosotros algunos extractos de las revelaciones privadas, con las que Nuestro Señor bendijo a una hija predilecta de la Orden de la Visitación: la Hermana Marta Chambón.
Prometo hablaros de ella más adelante, pero hoy, traigo aquí, a modo de meditación algunas de las palabras que salieron de boca de Nuestro Señor, referidas al ofrecimiento de Sus Santas Llagas como alivio y sufragio por las Benditas Ánimas.
REVELACIONES DE NUESTRO SEÑOR A SU SIERVA MARÍA MARTA CHAMBÓN, CON RESPECTO A LAS ALMAS DEL PURGATORIO
“Cuando hacéis el Viacrucis con corazón puroy desprendido de todo, en cada estación conseguís la misma gracia por los méritos de Mis Llagas.”
“Cuando ofrecéis Mis Santas Llagas por los pecadores, no olvidéis hacerlo también por las Almas del Purgatorio, ya que pocos piensan en lo que ellas sufren.”
Un domingo de Cuaresma, la Hermana María Marta Chambón no pudo asistir a la instrucción por enfermedad. Entonces se le apareció el Señor y le dijo:
“Yo voy a darte ocupación, ofrece tus sufrimientos en unión con los míos por las Almas del Purgatorio.”
La Hermana comenzó a hacer ese ofrecimiento y cada vez que lo hacía veía a un alma que subía al Cielo. Al llegar al vigésimo ofrecimiento, se le apareció el Eterno Padre y le dijo:
“Cuando ofreces tu corazón unido al de mi Hijo, te concedo a ti el mismo poder que a Él.”
Marta Chambón, procuró desde entonces hacerlo así y a cada ofrecimiento que hacía en unión con el Corazón de Jesús, veía cómo subía al Cielo una multitud de almas, “como una bandada de pájaros”, según su misma expresión.
¡Qué felicidad y cuánta esperanza!
ResponderEliminarGracias por compartir tan bella entrada.
Feliz tarde.