martes, 5 de abril de 2022

ÉSE ES EL VERDADERO AMOR



               Yo: Quería reposarte, Señor, como hace tanto tiempo me lo tienes pedido. Yo quería no ofrecerte nunca más el cuidado de mis infidelidades; pero, he aquí que he vuelto a caer en tantas faltas, que me admiro de que Tu Misericordia no se haya cansado.'' Él me contestó: "Aún cuando tú vivieras hasta el fin del mundo acumulando faltas sobre faltas, pero acechando siempre el momento del Perdón, encontrarías que el Perdón te estaba esperando, aun desde antes que tú hubieras comenzado a implorarlo.

               Recuerda que una vez dije: 'setenta veces siete'. Esto da la medida, sin medida, con que Mi Corazón responde a la pregunta: '¿cuántas veces tenemos que perdonar?' Conserva tu espíritu de penitencia.

               Yo: Pensaba luego en mi falta de valor para dormir las noches precedentes, en un lecho con pulgas. Él me dijo: ''¿No puedes soportar eso por Mí? ¿Ni por ti? Para expiar tus faltas, para expiar la marca creciente de los pecados del mundo actual. Déjate penetrar por un espíritu de humilde reparación.

              Recita durante todos los días de la Cuaresma el Salmo 'Miserere', por todos los hombres. Déjame activar en ti la suplicación; permanece en Mí, seamos Uno. Ruega a Mi Madre que presente así sus Jacob al Padre Celestial. ¿Puedo contar contigo, unida a Mí, para ayudar a las almas durante esta Cuaresma?. Yo: Sí, Señor. Él: Yo te ayudaré, como te ayudo siempre, cuando tienes valor para comenzar un sacrificio. No creas que cuando te esfuerzas por esto o por aquello eres tú la que lo hace. No eres tú, Soy Yo, que te ayudo. Y cuando el famoso sacrificio ya pasó, ni siquiera te vuelves a acordar al siguiente día. Ten pues ánimo. Ya sabes todo lo que sufrí por tu causa y por tu bien. Hace poco veías cómo un pedazo de cuerda medio caído de un camión, era arrastrado por todos los baches llenos de lodo; y pensaste en Mí, en el Pretorio, derribado por los verdugos y golpeando con Mi Cabeza las esquinas de las columnas. Sentiste al mismo tiempo horror y compasión. Que tu amor se traduzca en actos, porque ése es el verdadero amor. Yo te he amado así: imita a tu Cristo, pequeña esposa Mía.


6 de Marzo de 1941


De los escritos de la mística Gabrielle Bossis "Él y yo", 
con el imprimatur en 1957 de Monseñor Jacques Le Cordier, 
Obispo auxiliar de París; también del Obispo de Nantes, 
Monseñor Villepellet, del entonces Obispo Auxiliar 
y Vicario General de la Arquidiócesis de México, 
Monseñor Francisco Orozco y del Obispo Auxiliar
de Madrid-Alcalá Monseñor García Lahiguera.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.