"Descanso en el Corazón de Jesús y aquí tengo la fuerza para soportar mis males. Qué dulce es descansar en Jesús en nuestros dolores! Cómo me gustaría decir a todas las almas que sufren: corran a Jesús, agárrense a Él y descansen en Él. Y si alguien me dijera: no soy digno, porque he pecado, le diría que se refugiara aún más en ese Corazón Divino. Solo allí, siento yo mucha alegría y mucha paz, a pesar de mis innumerables faltas"
Sor María Josefina de Jesús Crucificado,
carmelita descalza
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