Es totalmente lícito aplicar la pena capital cuando la gravedad del crimen lo exige o cuando el sujeto constituye un peligro para la sociedad.
ALGUNAS CITAS CATÓLICAS que respaldan la justa pena de muerte.
"Incluso en el caso de la pena de muerte el Estado no dispone del derecho del individuo a la vida. Más bien la autoridad pública se limita a privar al delincuente de la vida en expiación por su culpabilidad, después de que él mismo, con su crimen, se ha privado del derecho a la vida. " (Papa Pío XII)
Muchos católicos padecen del “buenismo liberal” que malentiende y trastoca los valores tradicionales de nuestra Santa Religión. Lo mejor es acudir a las fuentes genuinas de la Doctrina y el Magisterio y descubrir lo que la Iglesia siempre creyó y predicó:
“Es lícito que un hombre sea ejecutado por las autoridades públicas. Hasta es un deber de los príncipes y jueces condenar a la muerte a los que lo merecen, y es el deber de los oficiales de justicia ejecutar la sentencia; es Dios mismo que quiere que sean castigados." (San Alfonso María de Ligorio, Doctor de la Iglesia)
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