Desde sus inicios, en Abril de 2011, he querido que esta página sea ante todo Católica: con todo lo que significa la palabra, con todo lo que conlleva la palabra, con todas las consecuencias que se desprenden de la palabra. Una página que siempre ha pretendido ser íntegramente Católica, por tanto, honrosamente Integrista, pues quiere representar todo aquello que sostiene la existencia de una Verdad objetiva que no se pone en discusión. Soy consciente que para la sociedad actual, esta actitud resulta condenable, ya que puede ser tomada por autoritaria o propia de épocas pasadas... nada más lejos de la realidad.
Fue el propio Papa San Pío X, quien usó el término "Integrista" para referirse a los buenos Católicos que combatían el error modernista; Integristas fueron los valientes Clérigos y seglares que denunciaron las herejías que se aglutinaban en torno a esta infecta corriente que empezaba a filtrarse en las venas de la Jerarquía a principios del pasado siglo y que encontró su auge en el nefasto "Concilio Vaticano II".
Por amor a Dios, siendo esclavo de María y por el bien de las almas, mi conciencia no me permite más que conocer y dar a conocer "a Cristo, y Este crucificado" (I Carta a los Corintios, cap. 2, vers. 2), el mismo Cristo que la Iglesia Católica, por Él fundada, predicó por dos mil años, sin añadidos ni adulteraciones en la Santa Doctrina que nos dio Aquél que es "Camino, Verdad y Vida" (San Juan, cap. 14, vers. 1-12) , Doctrina que nos ha sido transmitida ininterrumpidamente hasta nuestros días, Doctrina que ha sido regada por la sangre gloriosa de los Mártires, Doctrina acrecentada por los Santos y Doctores de la Iglesia, Doctrina santificada en la vida del Sacerdote que enseña y corrige, piadosa en los labios de la madre que enseña a rezar. Sana y Santa Doctrina Católica que nos conserva en la Verdadera Fe y nos hace participar del Cuerpo Místico de Cristo, Su Iglesia Inmaculada.
No hay mayor Caridad para con tantos hermanos que andan ciegos, que llevarles los retazos de Catolicidad que a diario se comparten en esta página; sé valiente, sé apóstol, sé buen Católico y únete a este sencillo apostolado: lee a diario "Como ovejas sin Pastor", aficiónate a alguna de las muchas prácticas de Piedad que te propongo, únete a nuestro grupo de Whatsapp, comparte las publicaciones en tus redes sociales...
Piensa en las almas que puedes ayudar, en las que pueden volver -aunque solo sea un momento- su mirada a Dios gracias a una imagen hermosa o a un texto certero. Tal vez solo podremos ver el fruto de nuestro desvelo en el Cielo, pero mientras tanto, que no desfallezca el espíritu apostólico -ni el tuyo ni el mío- y sobre todo, el ansia sincera de que Jesús y María reinen en todas las almas.
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